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Masajes Faciales

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Masajes Faciales

Existen muchos factores que pueden alterar la salud de tu piel, como la exposición al sol, el exceso de maquillaje, la falta de sueño e incluso la mala alimentación. Por suerte también hay tratamientos específicos para cada necesidad ¿pero has probado los masajes?

Luego de desmaquillar y aplicar tu crema de noche, es el momento perfecto de dar un masaje relajante y existen muchos métodos para hacerlo.
¿Has pensado en lo linda que es la piel de los chinos? Mucho se debe a su rutina diaria: el Qi gong es un masaje que ayuda a la armonía y la energía de tu cuerpo, y para hacerlo debes comenzar frotando tus manos para calentarlas, luego separar tus pies y, cuando te sientas relajada, comienza por la frente haciendo pequeñas fricciones sobre tus ojos, mejillas y boca.
Después frota enérgicamente tu frente con la ayuda de una esponja, cepillo o toalla hasta que sientas calor. Con esto puedes incluso prevenir las líneas de expresión.

Otra opción de masaje son las palmaditas: Párate con tus piernas a lo ancho de tus caderas e inclínate un poco hacia el frente para un mejor equilibrio. Ahora comienza a darte pequeños masajes circulares con la parte inferior de los dedos como si te estuvieras dan palmaditas. Sigue haciéndolo durante algunos minutos hasta que sientas esa zona relajada. Si lo que deseas es masajear la zona de los ojos, da pequeñas palmaditas con la yema de tus dedos alrededor de esa zona y las sienes. Para terminar, presiona con ambos dedos índices en el entrecejo y realiza un movimiento de abajo hacia arriba.

¿Sabías que el hielo es el aliado infalible de tu rostro rostro? Al usarlo mejorarás la circulación sanguínea y le darás un toque de brillo natural a tu piel. También sirve para reducir la inflamación a causa de granos y espinillas, además de tonificar. Para usarlo como corresponde, debes envolver algunos cubos de hielo en una tela delgada para no quemar tu piel y evita masajear una misma área más de 15 minutos.

Antes de terminar con alguno de estos masajes, nunca olvides humectar nuevamente. Con el tiempo, verás cambios significativos.